La historia que contamos en este artículo puede ser común a muchos que persiguen el deseo de vivir de su vocación, por eso la contamos para serle útil a los que necesitan información acerca de cómo será mudarse y dedicarse a cantar en otras ciudades. Esta es la historia y experiencia reciente de Ignacio Ojeda, un bajo rosarino que luego de una audición en La Plata comenzó a construir su espacio de trabajo como cantante.


Ignacio celebrando una foto en el Hall del Teatro Argentino de La Plata que muestra un ensayo de escena de Eugene Onegin donde él participa a comienzos de este año 2011.

En este momento Ignacio Ojeda ensaya con el Coro Estable del Teatro Colón donde ingresó después de aprobar una audición para refuerzos para la ópera Löhengrin, también dió examen para su puesto como bajo en el Coro de Cámara de la Municipalidad de Tres de Febrero donde es cantante estable, “Los coros profesionales son un sostén y es una buena manera de hacerse conocer”. Próximamente, hará el Beppo en “Gianni Schichi” con la Agrupación Opera Joven del Oeste y en Noviembre, “Der Schauspieldirektor” (El Empresario) de Mozart, el rol del Bajo bufo, el Señor Buff.

La historia empezó hace varios años como la de tantos jóvenes que hoy van trazando su camino profesional en la música. Con Ignacio nos conocimos a partir de la puesta de “El Barberillo de Lavapiés” una puesta que en 1998/99 dirigió íntegramente el maestro Mario Zeppa y lo organizó con sus coros vocacionales: el Pablo Casals y el Anselm Clavé del Centre Catalá de Rosario . Ignacio, adolescente, era el puntal de la cuerda bajos, un poco más tarde comenzó sus estudios musicales y paralelamente los de arquitectura hasta obtener ese título.


Ignacio cuenta que en el año 2007 debutó en “Carmen” con el rol de Zúñiga después de las audiciones que había organizado Opera de Rosario para la puesta en el Teatro El Círculo: “Desde el primer ensayo de orquesta de “Carmen” me dí cuenta que a eso quería dedicarme, cuando empecé a escuchar la orquesta y el coro de las cigarreras dije, es esto. En esa oportunidad las conocí a Marga Niec y a Susana Cardonnet, al poco tiempo en Marzo de 2008 ellas organizaron audiciones para trabajar L’elisir d’amore ,y allí me dieron el rol de Dulcamara. A esos ensayos viajábamos con Jaquie (Livieri) y con Ivana (Grennon) cada 15 días durante tres meses.
Por conocer ese rol, salió la posibilidad de trabajar la misma ópera con Agrupación Opera Joven del Oeste (una agrupación de intérpretes muy jóvenes que nos son de Capital sino de Morón, Haedo, Hurlimgham y Moreno).
Luego, en Rosario hice “Lucia di Lammermoor” con ARDAL en la Bolsa de Comercio y luego de una masterclass, comencé a tomar clases con Omar Brandán, fue a través de él que me enteré de las audiciones en el Argentino de La Plata, y así fue que audicioné en Diciembre de 2009 para el Coro Estable de Teatro Argentino de La Plata para “Lady Macbeth de Mensk” de Shostakovich, el 30 de diciembre me avisaron que me aceptaron y que en febrero tenía que presentarme”.

Mudar la vocación geográficamente

En el comienzo, hospedarse no fue fácil pero siempre sintió que debía estar allí para poder cumplir con su deseo de dedicarse a esto, y ese lugar que a veces no era del todo confortable, la sintió como su casa porque desde allí salía y hacia allí regresaba, todos los días de ida y vuelta a su trabajo de cantante.

Es inevitable preguntar porqué tomó la decisión de mudarse con su vocación, ya hoy una profesión, a otra ciudad, si bien la respuesta la imaginamos: ”la decisión la tomé porque aquí había escasez de trabajo y además hay pocas producciones y con dos o tres títulos al año las posibilidades son muy bajas, y aún menos para roles de bajo.


Desde febrero del 2010 me instalé en Buenos Aires, tenía que armar la vida en otra ciudad, en los ensayos me fui contactando con la gente, allí se conocen todos y yo llegaba de afuera. Habiendo estudiando afuera no conocés profesores, no conocés compañeros, sin embargo los mismos compañeros son los que te avisan de las audiciones o vacantes en las agrupaciones profesionales.
Así fue que me avisaron del Coro Municipal de Cámara de 3 de febrero, audicioné para refuerzo interino, estuve hasta las audiciones y quedé estable hace tres meses.
También audicioné para el coro de Buenos Aires Lírica para “Fidelio”, necesitaban bajos y allí fui también
”.

Qué se necesita

De acuerdo a lo que conversábamos con Ignacio podemos enumerar algunos de los requisitos personales para manejarse en este oficio en una ciudad como Buenos Aires, en primer lugar: tener buena lectura musical es fundamental para presentarse a las audiciones, y luego ejercer disciplina con los horarios (si un ensayo se anuncia a las 14, se llega a las 13:45 para empezar a la hora anunciada) y con el estudio, habiendo ingresado a algún elenco es fundamental estar alertas a toda la información sobre donde presentarse a otras audiciones.

La realidad entre Buenos Aires y Rosario es muy distinta teniendo en cuenta que allí hay muchos cantantes de todo el país y también, extranjeros de países sudamericanos que son contratados y que luego se nacionalizan argentinos para entrar a cuerpos estables Es decir, la posibilidad de trabajo es mayor pero la competencia, también.

”Los cantantes de Rosario estamos bien conceptuados”
En una oportunidad el administrativo de una institución lírica me dijo `vamos a tener que cerrar la General Paz´ porque nos invaden los rosarinos y agregó que siempre estaban conformes con sus rendimientos. Los cantantes de Rosario estamos bien conceptuados. Valoran mucho la línea de los cantantes rosarinos, escuchan cierto gusto en la línea de canto y yo creo que es por la gran tradición de música barroca y camarística que hay en Rosario y lo valoran mucho».


Ignacio Ojeda en el Teatro Argentino de La Plata en el ensayo de Lady Macbeth de Mensk de Shostakovich


Un recuerdo de `La Traviata´ en Teatro El
Círulo de Rosario – Temporada 2009, Ignacio Ojeda con el vestuario del Marqués d’Obigny, al centro, María Josefina Bertossi y a la derecha, Ignacio Agudo como “il Dottore”.

* “Los Senderos de la música” fue un ciclo de 10 programas para cuya producción trabajó la periodista que firma el artículo. Se escuchaba los Sábados por LRA5 Radio Nacional Rosario en 1985, el programa y su título fue autoría del especialista en Jazz José Actis, en su homenaje tomamos este título a partir de la fecha para (como en aquel entonces) contar historias, trayectos y recorridos, en este portal, sobre los jóvenes que trazan sus caminos profesionales.


María Josefina Bertossi
22 de julio de 2011
Rosario – Argentina

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