Tercera Función XXIª Temporada del Mozarteum Argentino Filial Rosario
Orquesta Académica del Teatro Colón
Director: Carlos Calleja Solista: Xavier Inchausti (violín)
Programa: Preludio de “Lohengrin” de R. Wagner – Concierto para Violín Nº 5 en La Mayor de Mozart y sinfonía Nº5 en Re Mayor Opus 107 de Mendelssohn
Sábado 14 de Junio – Auditorio Fundación Astengo


Además de conocer su instrumento, el músico tiene que saber también tocar en conjunto, y para esto surgen las orquestas juveniles que funcionan como escuelas para las futuras generaciones de integrantes de orquestas. La Orquesta Académica del Teatro Colón fue creada en 1995 por iniciativa del Maestro Oscar Piluso, con la finalidad principal de ofrecer un ámbito para que los jóvenes instrumentistas realicen la experiencia de la ejecución orquestal, dirigidos por prestigiosos instructores para cada una de la familia de instrumentos. Está formada por jóvenes músicos con un límite máximo de edad de entre 25 y 27 años. En los últimos años, este prestigioso organismo orquestal ha ofrecido varios conciertos en Rosario, pero esta es la primera vez que se presenta bajo la batuta de su actual titular el maestro Carlos Calleja

El concierto del Sábado comenzó con el Preludio de Lohengrin de Wagner, donde los violines durante los primeros compases “abren el fuergo” solos con notas pianíssimas, dinámica lograda por los académicos al igual que la afinación. Luego se suma toda la orquesta y así se ofreció la primera muestra de su sonido pleno y contundente.
Para la segunda obra la orquesta se redujo, se trataba de el Concierto para Violín Nº 5 en La mayor de Mozart, y probablemente este era el momento que mayor curiosidad producía en el público de esa noche, puesto que el solista, Xavier Inchausti, solo tiene 12 años.

Xavier Inchausti, nació en el mes de Setiembre de 1990 en Bahía Blanca, donde inició su estudios a los ocho años, primero con el piano y un año después con el violín bajo la guía del maestro Sergo Lazarev (concertino de la Sinfónica Provincial de Bahía Blanca). Su debut como solista se produjo en el 2001 junto a la Orquesta Académica de Cámara.
Delgado, alto para su edad pero con actitud de niño, esperó sin ansiedades durante el pasaje de la orquesta que introducía su primer solo. Luego, sus primeras notas en el allegro aliviaron la curiosidad de los presentes puesto que nos dimos cuenta que estábamos escuchando a un artista. Varias veces tuvo que salir a saludar (siempre con mucha humildad) como consecuencia de el aplauso incesante (incluido el de sus colegas de la orquesta) y de los “Bravos”, hasta que se decidió por interpretar fuera de programa una obra de Bach.

La Segunda parte estuvo dedicada a la obra de Mendelsohn sin dudas el momento de mayor lucimiento de toda la orquesta, especialmente de las filas de cellos y contrabajos logrando un sonido homogéneo, y de los vientos.

Durante todas las obras que integraron el programa se pudo apreciar el trabajo de comunicación entre la batuta y los instrumentos. El maestro Calleja les exige desde el podio, aún en las más livianas obras fuera de programa. La actitud exigente de Calleja frente a los jóvenes instrumentistas logra un verdadero comportamiento orquestal que continúa reafirmando los principios fundadores de esta escuela orquestal de alta calidad.