Disfrutar de la actividad que elegimos para vivir es uno de los objetivos de los seres humanos, no siempre se logra y en el caso de los cantantes este punto se ha transformado en objeto de estudio de distintas disciplinas. Hacia allí apunta el proyecto “Darte de vida” creado por la Prof. Susana Sáez, apoyado por el Fondo Nacional de la Artes.
Para Susana Sáez la inquietud de ponerse a trabajar sobre este tema apareció en un particular momento, retomando un reflexión profunda que ya realizaba, primero, como alumna de canto y, luego, como docente de la cátedra de canto:
“Me puse a escribir sin pensar que iba a llegar a feliz término. Darte Vida tiene que ver con esto: en canto siempre la técnica ha ocupado un lugar tan importante que en muchos casos pasó a ser más importante que la música misma, este fue un punto para reflexionar. Otro punto fue que el comentario que muchas veces se escucha en una mesa de exámenes sobre la poca expresividad de un alumnos de cantos, como se va a expresar si tiene que pensar en tantas cosas. Otra preocupación es la respiración, uno de los grandes conflictos del cantante.
Sobre todo esto empecé a estudiar, entre muchas cosas que hice fui a estudiar con Mónica Cosachov, que además de ser un genio musical se ha preocupado por la metodología de cómo enseñar. Así aprendí de ella cosas que van más allá de la música y que me sirvieron paramucho, esto es: investigar en mi campo que es el canto, investigar como unir el canto que es el ser de las personas, y que se puede ser uno mismo, y como encontrar los caminos para que la voz pueda salir en forma espontánea, desbloqueando las trabas por las que la voz no puede salir como esperamos.”
Es como poner la cabeza en el cuerpo, si pienso que voy a abrir la boca, levantar el velo del paladar, bajar la lengua, el resultado es que los músculos se tensionan, el resultado es un sonido tenso. Así el cantante se pasa la vida tratando de ver como puede hacer para que el sonido no se engole, es fácil criticarlo pero ¿cómo hacer para evitarlo?. Entonces, me metí en todas estas preocupaciones. Para mi estudiar canto es un ritual donde uno se contacta consigo mismo y, desde ese contacto, se empieza a trabajar. Entonces ya no más la repetición de recetas, primero lo experimento, lo consigo, y, luego, lo analizo. Busqué en este proyecto algunas disciplinas con las que creí que los alumnos podrían acercarse.
¿Con quiénes trabajaste en este proyecto?
Fue para un grupo de alumnos que se llamaba Argentia, muchas de las actividades se desarrollan solo con ese grupo, y logramos que algunos de los seminarios se desarrollaran para la comunidad, como el seminario con Betty Gambartes. Hay otros profesores con los que trabajamos como Norbeto Massera (actor) y Cristina Garabaglia especialista en el Método Feldenkrais.
¿Por qué hay tantos alumnos que cambian de maestro de canto?
Si vos permitís que salga esta relación propedéutica, el mundo interno con el mundo externo, allí vás a ver cual es el camino más cómodo, o “los” caminos cómodos.
Lo que más me gustaría es que la semillita en el grupo de alumnos pueda girar, y que se pueda ser feliz. ¿ Por qué sufrir para conseguir resultados si estamos haciendo arte?
También hay que tener en cuenta que en todo esto se producen crisis, y eso es natural, porque si venimos trabajando de una manera hay que dejar las estructuras, y empezar a estudiar desde otro lugar.
Participantes activos y oyentes del seminario `El Canto y sus recursos dramáticos´ con Betty Gambartes, una de las actividades del proyecto `Darte Vida´.
15 de Noviembre de 2007
Rosario – Argentina