El próximo 30 de octubre en la Semana Musical del Llao Llao en Bariloche se iniciará «Martha Argerich Presents Project” con el pianista rosarino (radicado en Italia) Daniel Rivera. Se trata de un importante proyecto musical internacional donde Argerich ejerce la Dirección Artística. Desde Italia la directora general Giovanna Pellai nos cuenta la historia, las características y el futuro de un conjunto de actividades musicales.

El proyecto tiene claros objetivos: favorecer colaboraciones artísticas entre músicos de distintas nacionalidades, edad y trayectorias, favorecer el interés por la música clásica y en particular modo por la música de cámara y formaciones camarísticas con piano, Difundir y hacer conocer la música culta y popular argentina, Seleccionar nuevos talentos musicales y organizar master class y cursos de perfeccionamiento para jóvenes músicos.

La información sobre este proyecto nos interesa especialmente puesto que Daniel Rivera, nacido y formado en Rosario, emigró para realizar una carrera musical que llena de orgullo a la ciudad de Rosario,

La Directora Artística del proyecto es Martha Argerich, la Organización artística la ejercen Daniel Rivera, Gabriele Baldocci, Martin Nijensohn
y la Directora General es Giovanna Pellai (en la foto pequeña junto a Argerich) quine nos relata los detalles:

– ¿Cómo surgió este proyecto con Marta Argerich?
Giovanna Pelai: A veces las cosas suceden….Martha, para mi tiene una capacidad natural de poner en movimiento muchas ideas y como así también muchas energías…
Tuve algunas ocasiones de estar junto a Martha, en particular el año pasado, durante el jurado del Concurso Pianistico Internacional «Franz Liszt» que se organiza en la ciudad de Ascoli Piceno en Italia.

Daniel Rivera que en esa época era director artístico del concurso, invitò a Martha a participar en el jurado como Presidente y ella aceptò. Obviamente yo lo acompañé y en esos días estuve mucho tiempo al lado de ella.
En esas noches tuve modo de conocer a Martha un poco màs en profundidad y ella conoció un poco mejor a mi. Su increíble generosidad y atención hacia los otros me «tocò» en modo particular. Es una persona que suele poner la amistad por encima de sus necesidades y esta no es una cosa común. Da mucha importancia a las relaciones humanas y se preocupa siempre de todos. Es de una generosidad inmensa hasta a veces extrema si quisiéramos definirla.
Desde haces años sabemos que ama tocar con varios músicos, sea en su Festival de Lugano en Suiza, o a Beppu en Japòn pero también en conciertos en varios lugares de Europa. Sin contar que desde siempre ha apoyado y continua apoyando a jóvenes que muy seguido «llaman a su puerta», que ella acoge en su propia casa, que ayuda a ponerse en evidencia, tocando junto a ellos o presentándolos en circuitos de conciertos de gran relieve.
Volviendo a la idea del Proyecto, cuando estuve en Lugano la primera vez quedé realmente impresionada por el clima que se crea entre los músicos participantes, que son invitados a tocar en varias formaciones. No siempre se conocen entre ellos, pero el hecho de tocar juntos crea sintonías, sinergías y crea el deseo de volverse a ver, de tocar nuevamente. Se crean amistades y colaboraciones artísticas. Por supuesto no siempre sucede!

De esto modo, hablando con Martha, me vino la idea de crear algo que pudiera unir músicos cercanos y afines a ella, un modo para continuar valorizar a esos artistas increíbles sin necesariamente contar con su presencia física (pero contando sobre la espiritual) y un modo para continuar a sostener el talento y los jóvenes. Asi fue que le pedí a Martha si había alguna vez pensado a una cosa similar, me contestò que no; le pregunté si le hubiera gustado desarrollar esta idea y me dijo que si. Asì, muy simple….
Esto sucedió en el mes de septiembre del 2009. En el mes de marzo del 2010 volví a ver a Martha en Roma, en ocasión de otros conciertos suyos. Ella me dió mucho empuje para continuar a pensar en esa idea y así fue que nació este proyecto que se consolidò definitivamente este verano, gracias también al aporte de ideas de Daniel Rivera, Gabriele Baldocci, Martin Nijensohn y Javier Waincymer que en Argentina y Sud America son nuestros colaboradores.
Nace así este proyecto que quiere y desea unir músicos de edad, experiencias y nacionalidades diferentes y que son vecinos artísticamente o humanamente a Martha Argerich.
Naturalmente esto no impedirá a nuevos artistas, jóvenes o ancianos, entrar en esta «red», a mi gusta pensar como una red de gran energía, que se podrá expandir gracias a los encuentros de numerosas personas intencionadas a «trabajar» para la música y para la cultura. Personalmente, creo mucho que el «hacer música» crea fuertes energías positivas, a mayor razón con el costeño de una persona increíblemente carismática como Martha, que es realmente una fuente de energía pura y que es la primera a dar el ejemplo de solidaridad entre músicos, de atención y respeto hacia los otros, de disponibilidad, amistad y colaboración. Para mi es también un modo de decirle: Martha, mira, esto es lo que he aprendido de ti.

– ¿Desde cuando se conocían con Daniel Rivera?

Giovanna Pelai: Martha y Daniel se conocen desde màs de treinta años. Para Daniel, como naturalmente para muchísimos pianistas, Martha es un ideal, un ejemplo profesional, un mito…y también un gran amor!
En el 1977 estos «dos argentinos» se encontraron en Milán: ella en el jurado del concurso Dino Ciani, él concursante. Daniel en esa época era muy joven, era el perìodo en el que se presentaba en muchos concursos pianísticos internaciones, entre ellos justamente el Ciani. En este concurso no ganò el primer premio, pero sí ganó un importante segundo premio. Claramente, esto para un joven de 25 años puede ser vivido como «una tragedia»…
Después del concurso charlaron entre ellos, sobre las pruebas, sobre el modo de tocar y de entender la música, sobre los concursos sobre las reales dificultades de enfrentar este tipo de «trabajo»….Martha en esa ocasión invitó a Daniel para que la visitara en su casa, como siempre ha hecho con muchos jóvenes de talento y que ha querido sostener y ayudar.
Daniel, quizás por su desilusión probada en ese específico momento y seguramente por una forma de timidez que lo caracteriza, no hizo fruto de esa ocasión y no fue. No la llamó, no se hizo sentir. Continuaron a verse solo en ocasión de los conciertos que Martha ofrecía en Argentina o en Italia, pero siempre sin profundizar más esta relación. Daniel avanzó la que hoy es una carrera importante.
Afortunadamente en el 2008 sucedió un encuentro donde se creó algo más profundo. Martha en ese periodo se presentaba en Italia junto a Gabriele Baldocci, extraordinario pianista que Rosario ya ha tenido la oportunidad de apreciar y Walter Delahunt, pianista canadiense, amigo de Martha de mucho tiempo.
Pasamos momentos maravillosos, contándonos historias y riéndonos. Durante esta visita Martha invitó a Daniel a participar en Lugano. Evidentemente hubo una sintonía natural y espontánea escondida desde lejanos tiempos que lentamente llevaron a retomar esta relación y este año Martha y Daniel han tocado «Les Preludes» de Liszt a dos pianos con una fantástica armonía de intenciones musicales.
Ahora, no obstante todas las dificultades creadas por los numerosos empeños de Martha que la llevan en gira por todo el mundo, logran tener viva esta relación, una serena amistad humana y profesional.
En el mes de diciembre tocarán juntos en Italia en cinco oportunidades.