Con motivo del concierto «Entre Zarzuelas y Operetas» que la soprano Graciela Mora y el barítono Juan Carlos Novero ofrecerán el domingo 18 de marzo a las 19:15 en el Museo Castagnino, charlamos sobre este recital y sobre la historia de una familia de cantantes. En piano participará Andrés Novero.
El dúo de la soprano y barítono, que además es un dúo matrimonial,
ha programado un interesante programa con páginas de la lírica española y la opereta alemana: Primera parte: La zarzuela española
El Roncalés – Salvador Ruiz de Luna – Zortzico /
Pensar en él, esa es mi vida – Marina – Emilio Arrieta /
La luz abrazadora de tu pupila – Marina – Emilio Arrieta /
Canción de Paloma – Barberillo de lavapiés – A. y Barbieri /
Cuantas veces solo – Los de Aragón – J. Serrano /
Para comprar a un hombre – L. Fernanda – M. Torroba
Segunda parte: Operetas tradicionales
Tuyo es mi corazón -El país de las sonrisas -F. Lehar /
Canción de Danilo – La viuda alegre – F. Lehar /
La canción de Vilja – La viuda alegre – F. Lehar /
Duo de Amor – La viuda alegre – F- Lehar.
Juan Carlos Novero: Casi siempre estamos con repertorios más tradicionales y en esta ocasión incorporamos obras que no se cantan tanto como Los de Aragón que es una zarzuela hermosa , o también el caso de “Pensar en él” de Marina.
La zarzuela no es una género para tomarlo en forma sencilla y simple, y tiene pasajes difíciles de gobernar para el canto, si te fijás naturalmente la zarzuela tienen la exhuberancia y el versatilismo vocal, la línea del tenor siempre es más agudo que el tenor de ópera, la línea del barítono igualmente, la soprano debe ser dramática o una mezo, siempre vá hacia los extremos. Además, vamos a ponerle algunos diálogos.
En lo referente a la segunda parte, hacemos la Viuda alegre que junto a El Murciélago son las que más se trabajan.
Hacer música con la familia
Graciela Mora y Juan Carlos Novero son los padres de Andrés Novero, cantante con el registro de tenor y también muy buen pianista; y de Marcela Novero, dueña de una de las voces de mezzosoprano más dulce y natural que se haya oído por estos lares.
Graciela Mora: Hacer música con la familia es complicado (risas), es magnífico, es lo más lindo que me ha pasado en la vida, cantar con mis chicos. Con el tiempo ellos fueron buscando otros compañeros porque van creciendo y buscan otras cosas. Andrés siempre se ocupó de la parte musical y siempre dirigió ya que aunque cantábamos los cuatro él siempre estaba pendiente. Por otro lado, Marcela estuvo un tiempo en Buenos Aires buscando más el repertorio popular.
Igualmente seguimos haciendo cosas juntos, por ejemplo, estamos los 4 en Opera de Rosario, y a veces Andrés o Marcela hacen algún personaje y nosotros estamos participando allí con ellos.
J.C.N.: En Lucia estábamos los cuatro .
La infancia de sus chicos y la música
G.M.: Haciéndole un pequeño homenaje a Rubén Coria, recuerdo que yo tomaba clases de repertorio con él y yo estaba embarazada de Andrés, él pateaba mucho porque le hacían mal las vibraciones. Luego, en los ensayos de un grupo de cámara en el que yo cantaba se tiraba al suelo “panza arriba” y se quedaba escuchando. Electra Giró siempre me decía:”estos chicos son unos santos”. A los 16 años Andrés me dijo que quería estudiar piano y comenzó en el Instituto de Norma Scarafía y luego siguió en la Universidad, mientras también quiso estudiar canto conmigo y viajabamos los dos a Buenos Aires para estudiar con Hugo Sorrenti y Ana María Marcó .
J.C.N.: Mis experiencias son muy lindas también porque a Andrés lo tuve mucho tiempo en el coro Alpino que yo dirigía y trabajábamos intensamente, tuvimos la suerte de viajar juntos a Laguna, Brasil, en un intercambio musical. Andrés es un gran músico y cantante. .
Todo empezó con Rigoletto
J.C.N.: El hecho de ser cantantes nos unifica. Lo nuestro fue muy fugaz, a veces uno dice como en tan poco tiempo pasó todo, y en poco tiempo uno se casa y empieza disfrutar. En aquel tiempo ella estaba en el Coro Pía Malagoli (alrededor de 1978) a partir de allí vino la simpatía .
G.M.: Con Elio Nannini (Ghio) nos conocimos en el conservatorio y nos hicimos muy amigos, un día él me dice qué te parece si nos anotamos en el coro de ópera que está en el Club Italiano (yo no tenía idea de la ópera para ese entonces porque cantaba popular integraba el Quinteto Voces) Teresita Festucci que era mi profesora nos dijo que vayamos, Rubén Coria que dirigía el Pía Malagoli, nos escuchó vocalizar a los dos y nos dijo: si Uds. me cantan en el coro yo les enseño repertorio. Al tiempo se hizo Rigoletto y allí lo ví a Juan Carlos, nos conocimos y empezamos a charlar .
J.C.N.: En aquella puesta, en principio Rigoletto lo iba a hacer Ricardo Sasso pero ya estaba enfermo y no podía, entonces me llamaron a mi, el elenco se completaba con Alba Rímini como Gilda y el Duque lo hizo Fernando Tejeira .
G.M.: El primer beso fue en la puerta de mi casa (edificio Supay, Sarmiento y 9 de julio) y en ese momento pasaba el Maetro Coria en colectivo rumbo a su casa, luego cuando lo volvimos a encontrar nos hizo saber que ya estaba enterado de nuestra relación. .
El presente
G.M.: En la actualidad nos sentimos realmente satisfechos, vivimos un gran momento porque nos incluyeron en el grupo de la Opera de Rosario y nos hacen sentir bien recibidos y los chicos nos invitan a compartir los fines de semana, es un grupo humano que con nosotros son muy buenos. Y después, Marcelo ( Aronna) que nos trata muy bien y nos ha considerado mucho. .
J.C.N.: Estando allí vemos a nuestros hijos que progresan y además vemos la pléyade de jóvenes cantantes que tienen Rosario en la actualidad y eso nos pone muy cotnentos.
La charla con esta pareja artística y real la hicimos en una sala de su casa que entre otras cosas está colmada de fotografías, allí se aprecian fotos de puestas con figuras de la lírica de años atrás y algunas con las imágenes de alumnos y alumnas de Graciela Mora que hoy ya iniciaron su carrera profesional con creces: Jaquelina Livieri, Daniela Ratti, Paola Sinópoli y Carina Calafiura, entre otros.
14 de marzo de 2012
Rosario – Argentina