Sin duda la figura central de este concierto será el baryton, este instrumento que construyó el luthier Leopoldo Pérez Robledo (de Buenos Aires) y que se escuchará junto a las rosarinas Alejandra Sottile y María Elena Derenzi también a cargo de otros intrumentos antiguos para un programa que anuncia Divertimenti de Händel para baryton y contínuo, entre otras obras.

Sobre el baryton, Pérez Robledo dice que no cree que vuelva a tocar viola da gamba o cello, porque está muy contento por la sonoridad del baryton.
“Nunca se había tocado en la Argetnina hasta hace unas semanas en el palacio de la legisatura de Buenos Aires y ahora, en Rosario. Según lo que el crítico Pablo Bardin le ha dicho , seguramente es la primera vez que se toca en el continente”.

¿Desde cuando hay literatura para baryton?
Polo Pérez Robledo: Hay literatura desde 1650, ya aparece descripto en varios tratados de época del siglo XVIII, y podemos suponer que viene de Inglaterra que es el país de la viola da gamba, porque el baryton es de la familia de la viola da gamba, es una viola da gamba de 6 o 7 cuerdas con el agregado de cuerdas en la parte posterior debajo de la tastiera que tienen su puente independiente, con entre 9 y hasta 24 cuerdas. Se tocó hasta fines del Siglo XVIII, su gran momento fueron los 30 años que Haydn vivió en la corte del Príncipe Esterhazy, allí tenían una teatro de marionetas para la que compusieron óperas de marionetas. Tanto Haydn, como Tomassini y Pleyel compusieron música para baryton porque el príncipe tocaba baryton.

¿Y por qué luego no tuvo la difusión como otros instrumentos antiguos?
Polo Pérez Robledo: Siempre fue un instrumento difícil para construir y para tocar, muchas cuerdas para afinar, para mantener, las cuerdas eran caras y ahora también lo son. La viola da gamba y, luego, el cello les sacacaron ventaja porque ambos, mucho más el cello, son más fáciles de mantener.

¿Cómo funcionan las cuerdas de atrás?
Polo Pérez Robledo: Se pueden tocar con el pulgar, o pueden sonar por simpatía, están afinadas en la escala de re mayor. Las cuerdas que se frotan y tocan adelante son de tripa las de atrás son de metal, como si fuera un clave.
Este baryton tiene dos meses de vida. Lo hicimos con otro amigo luthier Matías Crom, en realidad construímos dos, uno con cabeza de dragón y otro, con cabeza de un corcel.

¿Tu baryton es réplica de cuál instrumento?
Polo Pérez Robledo: Es de uno construido por el luthier Daniel Achatius Stadlmann, quien era un gran constructor austríaco de violines de esa época.

Qué obras interpretarán en el concierto?
Polo Pérez Robledo: Principalmente música de Haydn porque su obras son ideales para mostrar el baryton, porque todo lo escrito para viola da gamba y para cello desde el siglo XVII y XVIII se puede tocar con el baryton.

Leopoldo Pérez Robledo y muchas inquietudes:
Ha estudiado guitarra (con los maestros Ricardo Mandolini, Carlos Ravina e Irma Costanzo), laúd renacentista y barroco (con Carlos Ravina y Danyel Yolis), viola da gamba (con Ricardo Massún, Richard Boothby y Wieland Kuijken), armonía y composición (con Sergio Hualpa), e interpretación de la música del Barroco europeo (con Claudio Di Véroli).
Estudió luthería trabajando como aprendíz en el taller del Mtro. Osvaldo Bragán, colaborando en la construcción de laúdes, violas da gamba y guitarras barrocas, para especializarse luego en la construcción de réplicas de instrumentos antiguos de teclado.
Desde 2004 fundó y co-dirige la compañía de grabaciones y ediciones discográficas Syntagma Records.
Desde 2008 desarrolla junto al luthier Matías Crom, instrumentos de arco especiales como el baryton y la nickelharpa.