Societatis in Musica está integrado por Romina Amoruso y Valeria Sánchez (Sopranos)
María Elisa Ugartey María Ágil (contraltos), Juan Carlos Sáez y Horacio Castillo (tenores) y
Carlos Alfredo Casas y Pedro Ignacio Ojeda (bajos). Dirección:
Horacio Castillo

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El director de este octeto vocal describe así la época de esta producción musical y las características de esas obras musicales:
Tal vez la palabra «Glamour» no sea nunca tan apropiadamente utilizada como cuando se la refiere a la vida en Paris en el período que abarcó el fin de la guerra Franco-Prusiana de 1870 al estallido de la primera guerra mundial en 1914.
Para cualquier ciudadano del mundo, París era la capital por excelencia y su corazón eran los boulevards por donde el paseo constituía una atracción; sus cafés, restaurantes y cervecerías rebalsaban de intelectuales, algunos franceses y otros llegados de todo el mundo, que debatían acaloradamente la manera de liberarse de la pesada tradición del romanticismo. De estas fuerzas liberadoras surgieron las Vanguardias; representadas con mayor ímpetu en la pintura y seguidas muy de cerca por la literatura y la música.
El mandato del arte era el retorno a lo salvaje, y, por lo tanto, el del artista: hacerse salvaje; entendido esto como reencontrarse con el sentido natural de la expresión. ¿Dónde buscar esa bocanada de aire fresco que renueve las leyes estéticas? En las culturas exóticas, el pasado lejano, las nacientes teorías psicoanalíticas y la niñez, pensada como el paraíso perdido de cada hombre.

Con respecto a las obras que interpretaremos en este concierto, podemos decir que cada una parte hacia la búsqueda de alguno de estos lugares: La noche y la naturaleza en Saint Saëns; los sitios del pasado recordados difusamente en Debussy; los microcosmos interiores en Milhaud y Hindemith y la rústica canción popular en Ravel.
Es muy interesante remarcar la elección de los poetas: Charles D’Orleans, poeta medieval; Rainer María Rilke, el gran poeta alemán que tuvo a París como su hogar en los primeros años del siglo y los autores anónimos que de alguna manera representan la voz del pueblo «incontaminado».
El tratamiento musical es muy amplio y va desde la homofonía, cuando se quiere resaltar el valor semántico del texto, hasta la intrincada polifonía, donde las disonancias juegan un papel expresivo importantísimo, ya sea para dotar de dramatismo un pasaje (Yver, vous n’estes qu’un villain) como para lograr un efecto cómico-grotesco (Nicolette).

El Programa en detalle:
Primera Parte:
Camille Saint-Saëns (1835 – 1921) Deux Choeurs Op 68 – Texto: Anónimo
1 – Calme des nuits /
2 – Les Fleurs et les arbres

Paul Hindemith (1895 – 1963) – Six Chansons – Texto: Rainer Maria Rilke (1875 – 1926)
1 – La Biche
2 – Un Cygne
3 – Puisque tout passe
4 – Printemps
5 – En Hiver
6 – Verger

Segunda Parte:

Darius Milhaud (1892 – 1974) – Quatrains Valaisans – Texto: Rainer Maria Rilke
1 – Pays, arrèté a mi-chemin
2 – Rose de lumière
3 – L’annèe tourne…
4 – Chemins
5 – Beau papillon

Claude Debussy (1862 – 1918) – Trois Chansons – Texto: Charles D’Orleans (1394 – 1465)
1 – Dieu! qu’il la fait bon regarder
2 – Quant j’ai ouy le tambourin
3 – Yver, vous n’estes qu’un villain;

Maurice Ravel (1875 – 1937) – Nicolette – Texto: Anónimo

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