El 30 y 31 de Agosto la Orquesta Sinfónica Provincial de Rosario volverá a ser partícipe de una función de ballet después de muchos años. Su actual director titular , Maestro Javier Logioia Orbe, nos explica las particularidades de la dirección musical de un ballet. En la entrevista también hace referencia a las actividades con la sinfónica de Rosario y la actualidad de su trabajo con otras orquestas.

Referencias históricas- Argumento – Elenco del ballet “Giselle”

Hace 26 años que la Orquesta Sinfónica Provincial de Rosario no baja al foso para un ballet completo de repertorio, ballet de escuela o ballet blanco. Desde mi gestión he insistido tanto en hacer conciertos y óperas como también incorporar el tercer género que es el coreográfico. Estoy muy feliz de poder traer la compañía completa del Teatro Argentino de La Plata a quienes conozco mucho, porque los he dirigido muchísimas veces y además he sido director musical del teatro. Lo que hay que destacar es que no solo viene la compañía completa y que se hace en versión integral sino que vienen bailarines, solistas de primerísimo nivel y la puesta en escena es de una belleza increíble y con gran cantidad de bailarinas en escenas.

Desde la dirección musical, ¿qué es lo que hay que trabajar especialmente en un ballet?

J. L.: En la ópera estoy como director musical concertando que todo funcione pero siempre en ayuda del cantante, porque están solos tratando de recordar todo para hacer su parte escénica, musical, dramática. Con los bailarines, ocurre lo mismo, tengo estar muy pendiente de sus necesidades y, esas necesidades, más que físicas, son psicológicas. Dirijo mucho ballet y siempre hago una ronda por los camarines antes de cada función, con solo saludarlos ya me doy cuenta como están esa noche, si están cansados si están deprimidos, exultantes, todo eso es para mi una información muy valiosa para después acompañarlos y que ellos rindan lo mejor de sí. Recién le decía a los músicos de la orquesta que, rara vez un futbolista tiene un día de aquellos en los que estuvo hecho un crack y hace tres goles, esto también le ocupa a los bailarines y es algo que en los ensayos no lo podés prever. Mi función es mirarlos a ellos, estar atento a sus necesidades y seguirlos en base a los buenos hábitos que esa noche ellos lograron, tener más elasticidad, más equilibrio. El equilibrio es un fenómeno que a mi me cambia el “tempo”, si ellos no tienen equilibrio tengo que hacer todo más rápido, si tienen muy buen equilibrio lo puedo hacer más lento. El director musical tiene que estar al servicio de la música y ayudarles, esto es, que la orquesta sea una ayuda, no un estorbo.

¿Esas cuestiones rítmicas como influyen?
J. L.: Cuando ellos hacen una ronda de Fouettes* yo ya tengo que saber que “ese” es el tempo, ni más ni menos porque de otra manera los hago caer. Es algo que se aprende, es un oficio, la dirección del ballet es una especialidad, es tan apasionante como hacer ópera o conciertos.

¿En la formación del director se incluyen esos conocimientos relacionados con los movimientos de la danza?
J.L: No. Yo estudié en Viena y allí lo que más hacíamos era ópera, luego en Francia lo que más hacíamos era ballet y repertorio sinfónico. Eso está en cada uno. En la formación de un director rara vez se habla de cuestiones de ballet. A mi la danza clásica y la danza contemporánea me han gustado desde toda la vida, entonces por eso sigo los pasos, las técnicas y todos los trucos que ellos tienen para sus piruetas, pero es un interés personal.

Gestión frente a la Sinfónica Provincial de Rosario

En estos últimos meses el público del sur santafesino ha podido apreciar algunas actividades propias de una orquesta que parecían en desuso, por ejemplo las obras comisionadas, el maetro Logioia lo explica de esta manera:
«Estoy en un plan de renovación de ideas, ninguna es mía, pero esas ideas a largo de los años se fueron aletargando. Tener menos gente en la orquesta, que el repertorio se reduzca, no contar con sede propia, no contar con presupuesto propio, todos esos y otros puntos los vamos atacando y uno de ellos es el relacionado con la difusión. Una de las funciones que tienen las orquestas del interior es esa difusión, a mi me interesa la difusión de obras de compositores de Rosario, de la provincia de Santa Fé. El punto culminante de mi idea es tener un compositor en residencia. Esto significa un compositor que cambia cada cuatro, que trabaja full time, con esa orquesta se ensayan, se preparan y se graban sus obras. Este año comisionamos a obras dos compositores, a Ezequiel Diz cuya obra ya se estrenó (Obertura y tango) y el 26 de Octubre se estrena `Fantasmagoría´ de Marcelo Ajubita,. El año que viene comisionamos a tres compositores y así para en el 2008 contar sí, con un compositor residente.»

El maestro Javier Logioia Orbe proviene de una familia de músicos: “mi madre me contaba que yo le había tarareado una melodía de Brahms que ella había tocado cuando estaba embarazada de mi mientras preparaba un recital, después no la había vuelto a tocar. Mi madre es una pianista y directora de coros, mi abuelo violinista y pianista, mis tíos fueron músicos en el Teatro Colón. Me puedo remontar a varias generaciones hacia atrás y fueron todos músicos, así que yo no podía ser otra cosa que músico”.
Nacido en Tandil, su apellido en esa colorida ciudad de la provincia de Buenos Aires, es símbolo de música.

Durante el mes de julio y la primera mitad de Agosto sus compromisos como director lo llevaron a realizar su tercer viaje del año a Europa para dirigir en Francia, Alemania, Suecia y Seúl (Corea del Sur) y San Francisco (EEUU). Luego tuvo a su cargo la dirección de la ópera “Romeo y Julieta” de Gounod en el Teatro Argentino de La Plata con críticas que elogiaron especialmente su desempeño.
En el próximo mes de Setiembre dirigirá once funciones El Lago de los cisnes de Tchaikowsky en el Teatro Colón de Buenos Aires, en alguna de ellas bailará Paloma Herrera.

Es además principal maestro invitado de la Opera de Río (Brasil) y de la Opera de Lyon (Francia). En la ciudad carioca dirigirá Eugene Oñeguin de Tchaikovsky en enero de 2007 .

Con la OSPR, en esta temporada 2006 le resta dirigir nada menos que el Réquiem de Mozart con el Coro Estable de Rosario, el 3º concierto para piano de Rachmaninoff con Alexander Panizza y el acostumbrado concierto de fin de año en el Monumento a la Bandera.

¿En la música sinfónica aún no avanzó del todo el historicismo, qué opinión te merece ese movimiento musical ?
A mi me gusta mucho el tema, mi doctorado fue en análisis musical así que es un tema que me apasiona. Yo creo que el historicismo tiene que ir acompañado de las circunstancias que lo permitan, si yo quisiera hacer las sinfonías de Beethoven como en su época necesitaría los instrumentos de la época, como los instrumentos en estos últimos 150 años avanzaron tanto, la interpretación necesariamente se debe acomodar, debe acompañar a ese crecimiento. Ser revisionista pero no contar con todos los elementos que hagan a la historia real y que le den fundamento a eso, en mi opinión, es totalmente contraproducente. Los instrumentos modernos tienen una afinación que antes era mucho más baja, los instrumentos de si queremos ser revisionistas tenemos que trabajar con Manfred (Kraemer) porque tiene todos los elementos para cantar y tocar como se hacía en la época, yo no me puedo dar ese lujo porque nuestros instrumentos son todos modernos. Desde ya he dirigido óperas barrocas: Armida, Giulio Cesare, Dido y Eneas, todas fuera del país porque aquí los distintos grupos trabajan con sus maestros y no se hacen invitaciones como con las orquestas tradicionales, lo cual me parece bien.

* Fouetté: es un movimiento de látigo, una pierna se estira al costado marcando un círculo en el aire y se flexiona en la rodilla mientras la otra funciona como eje y sobre esta última se gira.


María Josefina Bertossi
Domingo 27 de Agosto de 2006
Rosario – Argentina


0 0 votos
Article Rating
Avisarme de otros comentarios
Avisarme de
guest

0 Comments
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios
0
COMENTA! Me encantaría conocer tu opiniónx