La Sala Guastavino del Centro Nacional de la Música, en pleno corazón de San Telmo (CABA), fue el espacio elegido para hacer música y recordar al maestro Antonio De Raco (1915-2010). El lugar se llenó de público puntualmente.  Nélida Sánchez,  pianista y alumna del maestro, organizó mucho más que un concierto, puesto que fue un re-encuentro con la música que amaba el Maestro y con los relatos de sus conceptos y de su positivo paso por la vida.

Sobriamente Nélida Sánchez fue hilando los recuerdos, la semblanza y la participación de cada uno de quienes fueron los discípulos de “Nino” (así lo llamaban los más cercanos). Nélida gestó la idea del homenaje y lo organizó con todo lo que esa tarea significa, y tomó como columna conceptual el discurso que De Raco hizo en Rosario al recibir el Doctor Honoris Causa en 2008. El recuerdo comenzó con un video de De Raco donde interpretaba «Navarra» de Isaac Albéniz en Viena en 1990.

Se leyeron mensajes de los señores Rubén Verna, Coordinador General del Centro Nacional de la Música, del pianista Sebastián Colombo desde el Centro de Estudios Pianísticos de Barcelona y del cantante argentino Víctor Torres.

La música del homenaje arrancó con quien fuera su último discípulo, Iván Rutkauskas con la Rapsodia Húngara Nº 10 de Franz Liszt.  Antes, Iván confesó que no le gusta hablar en público y que su maestro lo sabía, sin embargo, habló y lo hizo desde el mejor lugar, desde el corazón, y entre otras cosas conmovedoras, mencionó que cuando en las entrevistas periodísticas le preguntan a quien admira como pianista, todos esperan una respuesta “comercial”, y él les dice que admira a su Maestro porque así lo cree y así lo siente.

Luego, fue el turno de Eduardo Páez,  en piano y de Carlos Fernández,  en clarinete con 3 Piezas de Fantasía op. 73 de Robert Schumann.  De la misma manera antecediendo la interpretación, Eduardo destacó especialmente el perfil pedagógico, esa entrega de De Raco como pedagogo, como maestro que hace crecer su recuerdo en los mejores valores de la enseñanza. Por la ausencia de Víctor Torres, lo programado con el cantante fue reemplazado por el  Nocturno en do sostenido menor Op Pósstumo de Frederic Chopin también en la interpretación de Eduardo Páez.

Seguidamente Nélida Sánchez se unió a Beatriz Lisa,  ellas eligieron una obra a 4 manos, la Sonata de Francis Poulanc.

Roberto Wilchepol cerró la participación de quienes fueron sus alumnos con  una Selección de algunos números de Davidsbündlertänze op 6 de Robert Schumann, previamente, en su recuerdo mencionó su estrecha relación entablada  durante el tiempo que De Raco vivió en Alemania y España, rescatando su jovialidad y su voluntad de estudiar alemán a la edad en que otros hubieran elegido una actividad menos comprometida. Además,  Roberto señaló esa marca que llevan sus discípulos, esa impronta que dejó en cada uno de ellos.

Los momentos junto al Maestro De Raco fueron (en este homenaje) y son siempre evocados por sus alumnos con alegría, son recuerdos amables que no dejan de destacar la rigurosidad de aquellas enseñanzas.

La reunión se cerró con otro video del pianista y pedagogo en Viena en 1990, y su interpretación de Tras Danzas Argentinas de Alberto Ginastera, en el anuncio Nélida Sánchez recordó que la Danza del Gaucho Matrero el compositor se lo había dedicado a De Raco.

Desde Rosario estuvimos con el pianista y discípulo Víctor Cortés, fue un privilegio para quien escribe este artículo haber participado como también lo fue ser testigo de la última visita que De Raco hizo a Rosario en el 2008. En nuestra participación, nos centramos en su pedagogía y citamos también las palabras de su discurso en Rosario. Llevamos dos obras de Granados, una de las cuales fue La Maja y el Ruiseñor, la obra para piano.

En su discurso “Mi mundo sonoro”, De Raco describió su incesante búsqueda del sonido y la comparó con un acto de fé, y, en otro pasaje dijo textualmente: “En mí, este acto de fe se manifiesta también en la enseñanza. Un discípulo es la posibilidad de entrega, de transmisión de experiencia, de mutuos descubrimientos. Una posibilidad más de trascendencia”.

Antonio De Raco – 6 de octubre de 2008
Teatro El Círculo de Rosario

María Josefina Bertossi
29 de julio de 2014
Rosario – Santa Fé – Argentina

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